domingo, 22 de abril de 2012

URUGUAY - Frigoríficos demandan más vacas que novillos


A medida que se aproxima la llegada del invierno aumenta la oferta de ganado gordo y en consecuencia también crece la faena





Hay preferencia por la categoría de vacas, que es el negocio que hoy soporta más la industria, por costos. Los frigoríficos están comprando los novillos a precios que se ubican entre US$ 3,60 y US$ 3,65 por kilo en segunda balanza y las vacas entre US$ 3,45 y US$ 3,50, según informaron fuentes industriales a El Observador.
A medida que se aproxima la llegada del invierno aumenta la oferta de ganado gordo y en consecuencia también crece la faena. Se espera que la actividad esta semana supere la anterior. Además el otoño fue muy positivo para el rubro y permitió que los ganados se prepararan de la mejor forma, un hecho que favorece tanto a productores como a industriales.
En la actualidad quizá no todos los productores ganaderos estén dispuestos a vender sus haciendas gordas debido fundamentalmente a tres factores: la baja constante de precios en el mercado industrial, los altos precios de los ganados de reposición y el buen clima que permite esperar a que la situación se revierta mientras los ganados siguen engordando. De todos modos es probable que en este momento la oferta sea apenas superior que la demanda, ya que los productores también tienen en cuenta que el invierno se aproxima y por lo tanto es necesario alivianar la carga de los campos.
Ganados de feedlot.
Los frigoríficos realizan pocos negocios por ganados engordados en feedlot. Una serie importante de negocios generalmente se concretan en febrero, cuando los productores salen a comprar alimentos para los encierros y también ganados de reposición, pero este año esto no ocurrió.
Ovinos.
Se mantiene la escasez de oferta de ovinos para faena. Los productores que tienen corderos también aprovechan el buen tiempo y el forraje  para seguir produciendo carne y por eso no venden. Fundamentalmente hay dificultad para encontrar la oferta que se ajuste a las exigencias de peso y tamaño de los cortes demandados por los mercados internacionales.

FONTE: EL OBSERVADOR

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