Las empresas ganaderas monitoreadas por el Instituto Plan Agropecuario (IPA) mejoraron sus ingresos netos entre el 23% (las de ciclo completo) y el 27% (las criadoras) en el ejercicio 2011-2012, según el trabajo presentado ayer por el ingeniero agrónomo Carlos Molina, funcionario del IPA.
Molina destacó que los resultados económicos de ese período son los mejores de la serie de 11 años en que se ha realizado el estudio anual.
Molina aclaró que este trabajo no representa la realidad de toda la ganadería nacional, ni tampoco un análisis sectorial, sino que se trata del resultado generado en más de 100 empresas ganaderas que son monitoreadas por el IPA.
Agregó que en el período analizado los productores alcanzaron mejores resultados productivos y de ingreso de capital, lo que se tradujo en una mejor gestión económica.
El ingreso neto (ingreso de capital, menos pago por arrendamiento y pago por intereses) de las empresas de ciclo completo establece que el saldo que le quedó al productor luego de pagar los gastos de producción (económicos y financieros) sube nuevamente llegando a US$?52 por hectárea, 23% más que en el ejercicio anterior. Este resultado se convierte en el mejor de la serie y multiplica por 2,7 el valor promedio de los 11 años en que se ha realizado estudios.
Sobresale en términos productivos que, por segundo año luego de la sequía de 2008-2009, aumentaron los mejoramientos forrajeros el 6%, al llegar al 17% de la superficie predial.
A su vez los costos de producción subieron nuevamente, se ubicaron en US$?102 por hectárea para este tipo de empresas, 10% más que en el ejercicio anterior.
En materia de empresas , Molina informó que el ingreso neto también tuvo un desempeño favorable, respecto a años anteriores. El ingreso neto pasa de US$?44 en el ejercicio anterior a US$?56 en el 2011-2012.
Los resultados son aun más relevantes si se tiene en cuenta que en 2009-2010 el ingreso neto fue de US$?7 por hectárea y en 2008-2009 fue negativo en US$?7 por hectárea.
También para estas empresas los costos de producción siguieron creciendo, llegando en este ejercicio monitoreado a una suba de 11% respecto al anterior. Alcanzó a valores de US$?101 por hectárea. Desde el ejercicio 2001-2002 se multiplica por 3,6 veces.
Según Molina, se verifica nuevamente un crecimiento de la productividad vacuna, con un mantenimiento de los porcentajes de marcación a pesar de lo complejo que fue la situación climática.
Explicó que es relevante el comportamiento creciente de los precios, sobre todo de las haciendas vacunas, lo que contribuyó, junto al incremento de la productividad, a la mejora de los resultados.
En los predios que obtienen resultados más elevados, el componente del ingreso bruto de mayor importancia continua siendo la ganadería vacuna. Al igual que en el ejercicio pasado, la ganadería vacuna es la actividad más importante; con una participación destacada de la lana (fina) y algo menor de la carne ovina en aquellos predios con alta relación lanar/vacuno.
Costos al alza
Los costos de producción continuaron creciendo de 10% al 11%, lo que es habitual desde hace 11 años en las empresas monitoreada por el Instituto Plan Agropecuario (IPA). Según Carlos Molina (IPA), no hay dudas de que el comportamiento del valor del dólar (crecimiento de 17% de su valor respecto al peso en el ejercicio) y de la inflación interna (IPC 8% julio11-junio12) en este ejercicio contribuye positivamente y posibilita cierta licuación de costos en pesos de los predios, lo que resulta en un menor incremento de los costos totales.
Molina destacó que los resultados económicos de ese período son los mejores de la serie de 11 años en que se ha realizado el estudio anual.
Molina aclaró que este trabajo no representa la realidad de toda la ganadería nacional, ni tampoco un análisis sectorial, sino que se trata del resultado generado en más de 100 empresas ganaderas que son monitoreadas por el IPA.
Agregó que en el período analizado los productores alcanzaron mejores resultados productivos y de ingreso de capital, lo que se tradujo en una mejor gestión económica.
El ingreso neto (ingreso de capital, menos pago por arrendamiento y pago por intereses) de las empresas de ciclo completo establece que el saldo que le quedó al productor luego de pagar los gastos de producción (económicos y financieros) sube nuevamente llegando a US$?52 por hectárea, 23% más que en el ejercicio anterior. Este resultado se convierte en el mejor de la serie y multiplica por 2,7 el valor promedio de los 11 años en que se ha realizado estudios.
Sobresale en términos productivos que, por segundo año luego de la sequía de 2008-2009, aumentaron los mejoramientos forrajeros el 6%, al llegar al 17% de la superficie predial.
A su vez los costos de producción subieron nuevamente, se ubicaron en US$?102 por hectárea para este tipo de empresas, 10% más que en el ejercicio anterior.
En materia de empresas , Molina informó que el ingreso neto también tuvo un desempeño favorable, respecto a años anteriores. El ingreso neto pasa de US$?44 en el ejercicio anterior a US$?56 en el 2011-2012.
Los resultados son aun más relevantes si se tiene en cuenta que en 2009-2010 el ingreso neto fue de US$?7 por hectárea y en 2008-2009 fue negativo en US$?7 por hectárea.
También para estas empresas los costos de producción siguieron creciendo, llegando en este ejercicio monitoreado a una suba de 11% respecto al anterior. Alcanzó a valores de US$?101 por hectárea. Desde el ejercicio 2001-2002 se multiplica por 3,6 veces.
Según Molina, se verifica nuevamente un crecimiento de la productividad vacuna, con un mantenimiento de los porcentajes de marcación a pesar de lo complejo que fue la situación climática.
Explicó que es relevante el comportamiento creciente de los precios, sobre todo de las haciendas vacunas, lo que contribuyó, junto al incremento de la productividad, a la mejora de los resultados.
En los predios que obtienen resultados más elevados, el componente del ingreso bruto de mayor importancia continua siendo la ganadería vacuna. Al igual que en el ejercicio pasado, la ganadería vacuna es la actividad más importante; con una participación destacada de la lana (fina) y algo menor de la carne ovina en aquellos predios con alta relación lanar/vacuno.
Costos al alza
Los costos de producción continuaron creciendo de 10% al 11%, lo que es habitual desde hace 11 años en las empresas monitoreada por el Instituto Plan Agropecuario (IPA). Según Carlos Molina (IPA), no hay dudas de que el comportamiento del valor del dólar (crecimiento de 17% de su valor respecto al peso en el ejercicio) y de la inflación interna (IPC 8% julio11-junio12) en este ejercicio contribuye positivamente y posibilita cierta licuación de costos en pesos de los predios, lo que resulta en un menor incremento de los costos totales.
Fuente: El Observador - Agro
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